En la vida hay 4 cosas que amo con locura: Un té de Kepén, un buen libro, pintarme el cabello y comprar maquillaje. Esas 4 cosas me definen, aunque no sólo a mi, a muchas chicas en realidad, aunque nunca de la misma manera, ustedes saben. Todos tenemos 4 cosas que nos definen, ni 3 o 5, sino 4. Es un número par y va así como chiévere (si, chiévere, derivado de la palabra chevere, pero es algo mejor), pero tampoco es algo que uno decide de un día para otro, no. Toma tiempo, años de conocerte y yo, bueno a mis 18 digo que esas son las 4 cosas que me definen. Gracias a esas 4 cosas, he pasado los momentos mas bochornosos de mi vida, así como los más romanticos o los más extraños... Aquí vamos:
Una vez en Kepén pase pena, mi nombre lo escribieron mal y en vez de "Loana" pusieron "Leona" suele ocurrir, pero he llegado a pensar es que el que escribe tiene como deficit de atención crónico porque se lo deletreo y lo escribe mal.. El hecho es que cuando me llamaron, obviamente no respondí, mi nombre no es ese... Pero el pana seguía y seguía y mi amiga, con la que estaba, me dice que es mi orden.. Lo gracioso no fue eso, lo gracioso fue que estaba despeinada y cuando dice "Leona?" y yo "Eehh no, pero si, no explicaré" me vio y dijo un "Ahora entiendo tu nombre". Yo quedé en un HUH? De 2 min eternos y el riendose detras de la barra. Los de al lado se rieron y yo agarré mi té, me senté, me peine y listo, pero que pena pues... Gracias mamá por ese bello nombre que todos confunden con Leona, Yoana, Luana o hasta Lorena.
Con los libros? Uff bastantes cosas. El otro día me encontraba en una librería y como me gustó un libro me senté en el suelo a leerlo, poque saben un truco? Vas a librerias diferentes y te acuerdas de la pág del libro, lo buscas y así te lo lees en una semana. Ja! El hecho es que regresé a la misma libreria 2 veces, la misma semana, por el mismo libro y una chica se dió cuenta. Me dijo "No viniste antes? Si quieres leerlo, debes comprarlo" Y yo miré arriba, me paré y le dije "Si quiero leerlo, lo leo y ya". Me fui. Lo mejor? Mi novio fue y me regaló el libro, en otra librería. Cabe acotar que con todo y que me lo estaba leyendo en esa librería aún así lo compró, por eso el gesto romanticón es lo que cuenta.
Con los tintes, es algo loco. Siempre he sido así como que con mi cabello hago lo que quiero, eso crece o se recupera y cuando quise pasar de morena a pelirroja y de ahí a rubia, bueno.. Eso fue un chiste. Yo fui pelirroja, pero ese tinte es así como garrapatero, se queda en tus raices como para que nunca te olvides que una vez te pusiste un rojo y ahora sufriras la tortura de que todos los tonos de cabello se te vayan a naranja... No es que no me guste el naranja, es que no me queda bien. Una vez me dijeron que parecía una zanahoria. Estaba pálida y el tinte no rojo, sino rubio con un rojo garrapatero se fue a naranja. De ser una leona pase a ser una zanahoria y eso señores, fue extraño.. Voy muy bien en la vida.
Y bueno, maquillaje... Makeup!!! Jamás me cansaré de comprar maquillaje, de maquillar, de ser maquillada y ver maquillajes ajenos. La semana pasada una amiga y yo logramos recorrer mas de 3 km en Caracas buscando un delineador blanco. Delineador que no conseguimos, pero esas son las cosas que uno hace pues. Podriamos pasar todo un día viendo maquillaje y comprando. Maquillandonos y tomando fotos. Es algo muy de niñas y aunque tenemos 18 y 19 respectivamente, que importa! Es algo que hace que tengamos una mejor amistad.
Las amistades que te unen por cosas así, son las mejores. Amigas que no temen pintarse el cabello de colores raros, maquillar todo el día, poder tomar té toda una tarde o leerse siempre un buen libro, es lo mejor y sabes que? Yo las tengo. No todas son rubias... A decir verdad ahora la única rubia soy yo. Pero aunque ninguna de las 3 se conozca una a la otra, hay una cosa que las une: Somos tan parecidas que es en verdad muy raro y divertido al mismo tiempo.
Soundtrack de la semana? Algo así como de Emiliana Torrini para que te chillees este fin de semana de Halloween... So, ¡Happy Halloween!
Explotó la cocina, pero no se quemó la tarta!
Ok, bueno tengo que admitirlo, no soy de esas chicas que andan metidas en una cocina todo el bendito día, yo la verdad con una sopa Cup Noodles resuelvo, una pasta, algo sencillo que llene y me haga felíz..
Hay un dicho que dice "Hijo de gato caza ratón".. Si bueno, los gatos comen ratones es como obvio, la cosa es que me compré un libro de comida francesa y se los juro, me propuse el reto que se hizo Julie de hacer todas las recetas del libro, cuando porfin sente cabeza y me dije a mi misma: "Mi misma, no te mientas, no tienes tiempo para eso". Coye, no quería dejar pasar la oportunidad y el entusiasmo de preparar algo sabroso y francés así que aprovechando la ocasión, decidí prepararle a mi mamá estos 4 platos para el almuerzo de su cumpleaños:
1. Entrada: Tarta Tatín de Cebollas Rojas
2. Plato fuerte: Salmón en papillote con puerro acompañado de Patatas salteadas
3. Postre: Peras pochadas con salsa de chocolate
Una delicia verdad? Y así lo fue, en serio... Todo, hasta que la cocina explotó.
Era un cálido sábado 1ero de octubre, me levanté temprano, ya las peras pochadas estaban listas del día anterior (si, ese tipo de postres se preparan el día antes), el salmón listo, a caramelizar las cebollas, todo perfecto! Quise estar en onda así que no escuché mi iPod sino los Casettes de mi papá de música de los 50, me puse mi delantal y a cocinar.. Estaba nerviosa, nunca había trabajado con masa de hojaldre o había caramelizado unas cebollas.
Pasaron las horas, la tarta fue al horno, las patatas estaban listas, el salmon envuelto para ser horneado luego de la tarta y las peras esperando a ser servidas con helado y salsa de chocolate cuando, sentada en la sala con mi abuela leyendo el periódico y yo viendo el ávila escucho el grito de mi mamá: LOANAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA. (Aunque mas fuerte). Yo salí corriendo, vi fuego en el piso, no sabía si apagarlo con agua de chorro o potable (la de tomar estaba mas cerca) mi mamá lo apagó, mi hermano corrió y se alteró, yo escuchaba un PSSSSS del gas, mi abuela seguía con el periódico en la sala y lo único que pense fue.. "La tarta está en el horno" y es obvio, grite lo que pensé.
Abrí la puerta del horno, ahí estaba, dorada, en su punto, la masa de hojaldre crujiente y yo, felíz, la tarta no se había quemado, así que me fui a las sala mientras mi hermano y mi mamá terminaban con la cocina... Pensarás: Falta el salmón. Si, faltaba el plato fuerte así que lo puse en una bandeja, cruce a casa de mi madrina, lo horneé y yo estaba felíz porque la tarta no se había quemado (cabe decir que un hombre me vió raro cuando salí del edificio al de enfrente con una bandeja de hornear).
Al final todo salió bien, olía un poco a gas pero el olor de la comida lo tapaba, mi mamá tuvo su almuerzo de cumpleaños y yo descubrí que tengo los dones de ella... Sería como que ella es la gata y yo la gatita y comemos ratones, o algo así. El hecho es que el rato terminó en risa y llanto por parte de mi madre (luego fue que se puso nerviosa, al momento parecía O'Connell enfrentando a Inhotep en La Momia), y ahora quiero hacer tartas todos los fines de semana, rezando que no se explote la cocina de nuevo.
Finalizando, el soundtrack de la semana? Bueno, muy a los 80's porque mi mamá ama esa época. (lo que suena es Andy Gibb porsi no lo sabías)
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